«Y respondiendo el Rey, les dirá: De cierto os digo que en cuanto lo hicisteis a uno de estos mis hermanos más pequeños, a mí lo hicisteis.» — Mateo 25:40
El presente texto exhibe el modo del juicio cuando Cristo el Señor regrese por Segunda vez a esta tierra. El Hijo del Hombre vendrá en gloria a juzgar con justicia a los impíos y a juzgar con gloria a los creyentes que creyeron en Su nombre y mostraron en amor su creencia firme en Él. La respuesta del Rey es correspondiente a las obras de los justos hechas a los hermanos más pequeños. La identificación de los justos está bien clara, son los de la derecha del Padre, son las ovejas, los que recibirán la vida eterna como resultado de la obra completa de Cristo en ellos.
En este relato encontramos dos grupos que identificamos bien, las ovejas y los cabritos, pero hay quizá un tercer grupo mencionado «mis hermanos pequeños.» ¿Quiénes son? Ha sido una cuestión de discusión por los comentaristas. Sin embargo, considerando en detalle el texto podemos inclinarnos a pensar que se refiere a los mismos justos, a los de su derecha a las mismas ovejas. Denota este texto el amor en acción en ayudar a aquellos que están pasando todo tipo de necesidades. El Dios misericordioso es Rico en misericordia, pues aquellos que dicen tenerlo por Padre en consecuencia deben mostrar misericordia ante la miseria y necesidad de sus hermanos. Dios no olvida el amor que los creyentes muestran a sus hermanos, cada una de sus obras serán recompensadas sean buenas o malas.
Los hermanos pequeños. No se refiere a estatura física sino a la condición propia de ellos que resalta su humildad y sencillez como necesitados. Nada humilla más el alma de un hombre que encontrarse en su alma hundido en la miseria, necesidad y desesperación. Los mismos justos que habían hecho misericordia preguntan que significaba el hecho de que dar para las necesidades de sus hermanos era estar dando para el mismo Señor. Algunas de nuestras buenas obras no tienen en mente la eternidad, pero en aquel día todas esas buenas obras serán recompensadas. Aunque el creyente no debe obedecer y servir por la motivación de un galardón sino hacerlo por amor al Señor, es necesario también tener presente que lo que hacemos aquí ya sea bueno o malo rendirán sus resultados en el día de Jesucristo.
Pero aún queda la pregunta ¿quiénes son esos hermanos pequeños? Hemos identificado que son los mismos justos del versículo 34. La identificación como tal es clara, sin embargo, un detalle que se da en la Escritura es aquellos que hacen la voluntad del Padre identificados como los misioneros dado al contexto del evangelio de Mateo (Mateo 10:11–13) El erudito del Nuevo Testamento Craig Keener resalta ese detalle en su comentario:
En algunos textos apocalípticos judíos, las naciones serían juzgadas por la manera apocalípticos judíos, las naciones serían juzgadas por la manera en que habíen que habían tratado a Israel. En la Biblia, Dios también juzgaba a las personas por an tratado a Israel. En la Biblia, Dios también juzgaba a las personas por la manera en que trataban a los pobres. Pero dado el uso de “hermanos” (12:50; la manera en que trataban a los pobres. Pero dado el uso de “hermanos” (12:50; 28:10; el término griego puede incluir ambos sexos) y quizá “más pequeños” (5:19; 28:10; el término griego puede incluir ambos sexos) y quizá “más pequeños” (5:19; 11:11; cf. 18:4; 20:11:11; cf. 18:4; 20:26; 23:11) en otros lugares en Mateo, este pasaje probablemente 26; 23:11) en otros lugares en Mateo, este pasaje probablemente se refiera a la acción de recibir mensajeros de Cristo. Tales misioneros necesitaban se refiera a la acción de recibir mensajeros de Cristo. Tales misioneros necesitaban albergue, comida y ayuda frente al encarcelamiento y otras complicaciones albergue, comida y ayuda frente al encarcelamiento y otras complicaciones provocadas por la persecuciónprovocadas por la persecución….. Recibirlos era como recibir a . Recibirlos era como recibir a Cristo…. (KEENER, C. S., Comentario del contexto cultural de la Biblia: Nuevo Testamento (El Paso, TX Octava edición2014) 114.)
En todo caso, sean misioneros o no. Permítame proporcionar algunos puntos sobre la realidad misionera. ¿Quiénes sufren más en los campos misioneros sino los misioneros mismos? La iglesia cristiana en occidente debería desprenderse más de su egoísmo y pensar en la necesidad misionera de Asia y medio Oriente. Una de las calamidades de la iglesia hoy en día es su egoísmo y su cristianismo centrado en las necesidades propias de nosotros mismos. Toda iglesia debiese aportar a la causa misionera, no importa sino han encomendado algún misionero de la propia iglesia lejos de sus límites, pero podemos dar y orar por ellos. No importa sino conocemos tales misioneros en persona, pero podemos unirnos a la causa del Reino de Dios en otras partes del mundo aportando de nuestros bolsillos para las necesidades de los misioneros y sus familias. Quizá nosotros seamos esos que pregunten ¿cuándo te vimos Señor? La obra misionera y la necesidad misionera es extensa debiésemos abundar en esta causa. La obra misionera necesita nuestra ayuda. Y todos aquellos hermanos que padecen necesidad también la necesitan. Es interesante notar como los hermanos pequeños son identificados por el mismo Rey.
V3355–3366 Tuve Tuve hambre, hambre, tuve stuve sed, fui ed, fui forastero, estuforastero, estuve desnudo, enfermo, en la cárcelve desnudo, enfermo, en la cárcel..
¿Quiénes sino aquellos que trabajan en la obra del Señor en misiones están expuesto a esto?
En conclusión, nuestro amor por Cristo se muestra haciendo y no diciendo. Si amamos al Señor debiésemos por anhelar que otros lo conozcan y para ello ayudar a los hermanos necesitados. Las palabras de Thomas Brooks son necesarias en estos días de egoísmo y consumismo que es característico de un cristianismo tibio e insípido.
«El amor a Cristo y a las almas hará que un hombre esté dispuesto a gastar El amor a Cristo y a las almas hará que un hombre esté dispuesto a gastar lo suyo y a ofrecerse a sí mismo. Aquel que ora, predica, estudia y trabaja lo suyo y a ofrecerse a sí mismo. Aquel que ora, predica, estudia y trabaja hasta morir, por el honor de Cristo y el bien de las almas, no sufrirá perdida hasta morir, por el honor de Cristo y el bien de las almas, no sufrirá perdida al final. El amor divino esal final. El amor divino es como una vara de mirto, que, como dice Plinio, como una vara de mirto, que, como dice Plinio, hace que el viajero que la lleva en su mano no se desmaye ni se fatigue.hace que el viajero que la lleva en su mano no se desmaye ni se fatigue. El amor divino es muy operativo; si non operatur, non est, si no obra, no es amor divino es muy operativo; si non operatur, non est, si no obra, no es amor divino en absoluto. El amor divino, como el fuego, namor divino en absoluto. El amor divino, como el fuego, no está inactivo, o está inactivo, sino activo. Aquel que ama no puede ser infructuoso. sino activo. Aquel que ama no puede ser infructuoso. El amor hará que el El amor hará que el alma sea constante y abundante en hacer el bien. Dios no admite a nadie alma sea constante y abundante en hacer el bien. Dios no admite a nadie en el cielo, dice Justino Mártir, sino solo a aquellos que puedan en el cielo, dice Justino Mártir, sino solo a aquellos que puedan convencerlo, por medio de suconvencerlo, por medio de sus obras, de que lo aman.s obras, de que lo aman.»
Maycon J. Ramirez P.
Pastor en Iglesia Bautista Confesional Osorno, Chile