Según Hechos 13:22, David fue un «varón conforme al corazón de Dios.»
¿Querrá la Escritura con esta expresión presentamos a David como modelo de perfección? No; porque no calla sus muchas y graves faltas, ni sus correspondientes castigos. ¿Cómo y en qué sentido, pues, fue varón conforme al corazón de Dios? Busquemos los paralelos. En 1 a Samuel 2:35, dice Dios: «Me suscitaré un sacerdote fiel que haga conforme a mi corazón;» de lo que resulta, tomando todo el pasaje en consideración, que David, especialmente en su calidad de sacerdote-rey, obraría según el corazón o voluntad de Dios. Esta idea se halla plenamente confirmada en el pasaje paralelo del Cáp. 13: verso 14, adonde además encontramos que era en vista del rebelde Saúl, y contrario a su conducta malvada como rey, que David seria varón conforme al corazón de Dios. Si bien David, pues, como vemos por la historia y por sus Salmos, ordinariamente fue varón piadoso, en muchos casos digno de imitación, no nos autorizan de ningún modo los paralelos de nuestro pasaje a considerarle como modelo de perfección, siendo su significado primitivo, como hemos visto, que David, en su calidad oficial, contrario al rebelde rey Saúl, seria varón que obraría conforme al corazón o voluntad de Dios.